¡A punto de perder el trabajo por ayudar a un anciano… hasta que el jefe lo reconoció!
«¡Oye, quítate de en medio, abuelo, en serio, date prisa!» La voz, chillona y altiva, cortó el aire enrarecido del ascensor atestado en la imponente Torre Méndez, en pleno centro de Madrid. «¿Cómo te atreves a ponerle las manos encima a un anciano?», replicó otra voz firme y clara, sorprendiendo a todos. «El ascensor ya … Read more